TAL VEZ



Pero una cosa es cierta: 

No me atrevo a juzgarte. 

Sé que cuando uno ve las cosas desde fuera, cuando uno no se siente complicado en ellas, es muy fácil proclamar qué es lo malo y qué es lo bueno.

 Pero cuando uno está metido hasta el pescuezo en el problema (y yo he estado muchas veces así) ...

 las cosas cambian, la intensidad es otra, aparecen hondas convicciones, inevitables sacrificios y renunciamientos que pueden parecer inexplicables para el que sólo observa.

“La Tregua” Mario Benedetti

Poema de la Despedida

Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.

No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.

Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.

No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco; pero sí sé que nunca volveré a amar así.

Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo, y el corazón me dice que no te olvidaré; pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo, tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.

Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...

Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.


José Ángel Buesa

RDC